Datada en el siglo XV  presenta un estilo sobrio a la par que bello, encontrándose bien conservada y manteniendo su estructura original.  Construida en piedra y ladrillo,  es la única de su tipología que queda de las ocho que la Orden de Santiago  tuvo en la localidad , siendo por tanto en este sentido, testimonio vivo de buena parte de nuestra historia.

Tiene su nave dividida en cuatro tramos por arcos fajones con un primer pórtico de entrada situado al oeste. Tan solo catorce templos en la Baja  Extremadura, disponían de sacristía y en esta ermita se construyó aprovechando la construcción de un nuevo pórtico en 1550.  Este hecho, unido al emplazamiento privilegiado de la propia ermita (cercano al Castillo de la Encomienda) da muestra de la notabilidad que ostentó en tiempos.

El exterior de la ermita se muestra a modo de deambulatorio pues aún puede verse una pequeña hornacina situada en el ábside que albergaría con total seguridad una imagen de Ntra. Sra. de Coronada de reducido tamaño.

 Nota importante: El horario de apertura es aproximado y puede verse alterado