Responde al modelo característico de arquitectura religiosa-popular de la región (aunque posee reformas posteriores)

De reducidas dimensiones y orientada hacia el oeste, se compone de un pórtico y nave cubierta por distintas bóvedas de arista que se enmarcan en arcos fajones. En la cabecera, cubierta por una pequeña cúpula, encontramos un altar de mampostería donde a través de un arco trilobulado se puede admirar la imagen del Stmo. Cristo del Humilladero, talla de incomparable belleza.

El valor de esta ermita reside no sólo en la pureza de su tipología sino también en la manifiesta implicación devocional.